Mariana es acusada por Karla, una compa era de trabajo, que no puede sonreir porque no tiene pr ncipe azul. Mariana al escuchar semejante afirmaci n queda impactada, pero descubre que Karla puede tener raz n. Entonces decide encaminarse en rescatar su sonrisa. Al final, Mariana decide buscar a su antiguo novio, Paolo, quien al parcer es el culpable de robar su sonrisa.