"Acu state conmigo" no es, ni de lejos, la declaraci n m s rom ntica que Elo sa haya escuchado en su vida. Adem s, escuchar que est hecha para el placer de un ni o rico tampoco es muy cautivador; sin embargo, ella misma tiene que aceptar que parecen muy adecuados el uno para el otro en ciertos aspectos de la vida. Podr de esta transacci n de placer nacer algo duradero? O, tal como ha sucedido en el pasado, ser s lo el inicio de otra historia...