En 1981, Sara Kleiner de Wiesenfeld, ya viuda, emprendi? el invalorable cometido de narrar su historia, que era tambi?n y sobre todo la historia de Le?n Wiesenfeld, su esposo, y la suya juntos. Sab?a que estaba recuperando una memoria que llegar?a a sus hijas, sus nietos, los bisnietos y tataranietos que a?n no ten?a. El relato de Sara, por ella misma titulado Le?n y yo, comenz? siendo un conjunto de cartas enviadas durante cuatro meses a una nieta...