El libro est dirigido a cristianos de car cter ntegro, que no le dan al tentador ni "un dedo" de ventaja sobre sus vidas, iglesias y ministerios. Es dirigido adem s, a todos los que usan como escudo la justificaci n humana, a esos que dicen: "todos tenemos debilidades", "todos pecamos"; con el pretexto de vivir seg n sus propias pasiones, sin hacer el intento por ser fieles a Dios. Es tambi n para aquellos que han "entrado en tentaci n", "cedido...