La llama del amor que estaba ubicada en el coraz n en todas las criaturas de las nueve tierras, en la tercera era, fue robada por una bestia oscura y escondido en las entra as de los dioses del abismo. Una densa oscuridad dio paso a una maldici n donde la llama del amor era tan oscura como la oscuridad. A Ikira Coraz n de fuego, se le neg el amor cuando era ni a. Una diosa hechizo su coraz n. Ikira lucha contra las trampas del amor que oscurecen su coraz n y le impiden enamorarse de cualquier criatura que se mueva por las nueve tierras.