Parece que mi pap se meti en problemas, y ahora mi vida medida est en peligro. Para mantenerme a salvo, contrat a un guardaespaldas: un tipo insoportable con un cuerpo fornido, una mirada g lida y una sonrisa sard nica. A este tipo le desagradaba a primera vista, me confund a con una ni a malcriada caprichosa. Pero no ten a prisa por convencerlo de lo contrario. Primero, tengo que hacer que la vida de Rambo a medias sea un infierno