Jes s termin su misi n al volver al cielo victorioso sobre la muerte, y despu s de su ascensi n el Padre envi al Esp ritu Santo a fin de que estuviera en todo aquel que pusiera su fe en Cristo. Como veremos, la petici n que el Se or Jes s hizo en Juan 14:16 es una realidad para nosotros hoy.
El Esp ritu Santo est estar con nosotros hasta el fin de los tiempos. "Y yo rogar al Padre, y os dar otro Consolador, para que est con vosotros para siempre: El Esp ritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conoc is, porque mora con vosotros, y estar en vosotros." Juan 14; 16 - 17 RVR60