El augurio, esa profec a sin dioses, se invent para poder descifrar el destino. Utilizado desde tiempos inmemoriales, el or culo, el augurio, produce una falsa sensaci n de seguridad. Augurar es el procedimiento m s antiguo, y atrevido, de injertar el presente en la trama del devenir, y presupone que el ma ana es desentra able. No cort is lo que pod is desatar, parecen decirnos. Los augures, seres iluminados por dentro, trataban de hacer del futuro...