Ten amos al asesino delante y era imposible atraparlo. Si no hab a m vil aparente, si no ten amos huellas, si no hab a pruebas y nadie confesaba... d nde estaba? Lo nico seguro que ten amos era el cad ver, una navaja que nadie parec a reconocer, un guante sin huellas, una foto borrosa y unos naipes.Avisados de un ins lito asesinato en medio de una fiesta nocturna, dos agentes de la polic a judicial emprenden la investigaci n, interrogando a doce...